viernes, 6 de noviembre de 2009

El XVIII Congreso del PCE arranca hoy

Los anuarios de 2009 recogerán dos hechos incontestables acerca del XVIII Congreso del Partido Comunista de España. Uno, que Francisco Frutos cede el liderazgo a José Luis Centella. Y dos, que el cónclave comenzó en Madrid el 6 de noviembre de 2009. O sea, hoy. Es cierto, es la fecha oficial. Pero también lo es que la historia de este decisivo congreso empezó a escribirse un año antes, cuando Izquierda Unida celebró su IX Asamblea Federal y eligió como nuevo coordinador al comunista Cayo Lara.
La victoria del PCE en aquel asalto ha determinado el clima y las líneas maestras de este congreso. Una de ellas, capital, el cierre de un debate añejo: IU sí, IU no. Los documentos que se aprueben este fin de semana dejarán “meridianamente claro” que la “apuesta estratégica” del PCE, la única posible, es IU. Así, el aparato del partido pretende derrotar una postura minoritaria –un 10-15%–, pero que ha contado con un gran poder desestabilizador en los últimos años, durante la guerra cruda y abierta con el ya ex coordinador, Gaspar Llamazares, y aún antes, casi desde el nacimiento de IU, en 1986.
La
ponencia política que llega al cónclave proclama que el PCE ha de situarse “a la cabeza del proceso refundador de IU”. Pero el compromiso del PCE con IU “se hará aún más claro” durante este congreso, a través de las enmiendas que se acepten. Y es que el capítulo del texto que detalla las relaciones del partido y su marca electoral ha resultado para algunos dirigentes “farragoso y alambicado”. Es difuso con respecto a la necesaria “autonomía” de los dos proyectos.


No es baladí. La dirección del PCE ha tenido que apagar los focos rebeldes –Sevilla, Asturias– que exigían que el partido saliese de IU y concurriese solo a elecciones. “Para complacer a esos sectores, el aparato quizá ha cedido demasiado en la redacción. Debe ajustarse y aclarar que el PCE no debe ser un obstáculo para IU, sino impulsor de su funcionamiento”, subraya un miembro de la cúpula. “No queremos equívocos. Concretaremos esa parte de relaciones PCE-IU”, refrenda Fernando Sánchez, secretario de Organización saliente.
“El PCE es una parte de IU, que debe dedicarse a la lucha en el mundo del trabajo y al análisis intelectual, la reflexión –señala Centella, el próximo secretario general–. IU es una síntesis del PCE y de otras gentes de izquierdas, que se articula en torno a un programa, y a quien le compete el debate en las instituciones”.
Cayo Lara comparte la tesis. El coordinador defiende que las relaciones han de volver “al punto de donde nunca debieron salir, al pleno respeto y autonomía mutuas. Subordinación de uno a otro, ninguna”. Lara tendrá silla en el Comité Federal del PCE, el máximo escalón de dirección entre congresos, pero no tendrá puesto en los órganos de gestión cotidiana, la Comisión Permanente y el Comité Ejecutivo.

2 comentarios:

L3óN dijo...

alli nos vemos.

Saludos

Anónimo dijo...

en los tiempo que vivimos este congreso si tenia que ser un acomtecimiento planetario voy mas lejos que la Pajin tenia que ser un movimiento revolucionario me he animado es que estoy releyendo la revolucion permanente de que por cierto fue un español el que se lo quito de la circulacion me refiero a Trotski, buen trabajo camarada patria o muerte con la crisi que tenemos salud.