La empresa Aqualium, que trajo a Logroño en marzo la exposición de las 'gominolas' para inaugurar la Gran Vía, ha facturado un mínimo de cinco millones de euros desde su creación en febrero del 2004. Propiedad de la galerista María Porto, esposa del que fue ministro de Fomento, Francisco Álvarez-Cascos, una buena parte de la actividad de esta compañía se ha centrado en contratos con ayuntamientos, los más del PP, pero alguno también del PSOE.
Los datos son parte de un extenso reportaje que el último número de la revista Interviú dedica a los negocios de la pareja y donde aparece la exposición de 'las gominolas' en lugar destacado. La publicación recoge la denuncia realizada hace unos días por el Grupo Municipal del PSOE, en el sentido de que Aqualium cobró 116.000 euros de dinero municipal a través de una partida que se le asigna a las empresas Eulen y Aguas y Jardines para mejora de zonas verdes. Un pago que tuvo lugar después de que el anterior Gobierno municipal anunciará que el coste de la muestra escultórica se iba a financiar por las empresas encargadas de la reforma de la Gran Vía.
En el reportaje se afirma que Aqualium tuvo unos beneficios de 300.000 euros sólo en el 2004. Del resto de ejercicios se desconocen sus cuentas porque «no han sido presentadas en el Registro Mercantil de Madrid».
El semanario dedica también unas líneas al autor de la muestra, Eladio de Mora, que trabaja bajo el pseudónimo dEmo. Se trata, dice la publicación, de «un peculiar artista nacido en Getafe (Madrid), que es dueño de una inmobiliaria, Ibersol Consulting, y de empresas con nombres tan poco artísticos como Renta Getafe S.A., Ahorros y Gestión del Patrimonio S.L. e Innovación y Desarrollo de Construcciones». Según Interviú, a dEmo «lo han definido como 'el artista provocador de sonrisas' por las flores, ositos, patos y ángeles de colorines que diseña».
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