IZQ. CALIFICA DE CONTINUISTAS LOS PRESUPUESTOS DE LA RIOJA PARA EL 2008 Y DE DECEPCIONANTES LOS DEL AYUNTAMIENTO DE LOGROÑO

Izq. (Izquierda Unida-Iniciativa Ciudadana-Los Verdes) considera continuistas los Presupuestos presentados ayer por el Gobierno de La Rioja y decepcionantes los anunciados también por el equipo de gobierno del Ayuntamiento de Logroño.
Para Izq, los Presupuestos autonómicos mantienen las grandes líneas de lo que ha sido la política aplicada en los últimos años por el PP, basada en favorecer los intereses empresariales y de los que más tienen, frente a las auténticas necesidades y demandas de la mayoría de los trabajadores y de los sectores más desfavorecidos de nuestra sociedad. Así, se insiste en la rebaja de impuestos que sólo beneficia a las rentas más altas, detrayendo recursos para hacer frente a los importantes déficits sociales de nuestra Comunidad Autónoma.
Esta semana dábamos a conocer un informe que sitúa en el 19,6% el porcentaje de riojanos por debajo del umbral de la pobreza y estos presupuestos no abordan un plan de choque contra esta realidad, ni establecen como prioridad el combate contra la precariedad laboral, la necesidad de nuevas infraestructuras sociales, etc.
En el caso de los Presupuestos para la ciudad de Logroño, la decepción es aún mayor por haberse producido una alternancia en el gobierno municipal y, a pesar de ello, mantenerse las mismas líneas presupuestarias del Gobierno del PP.
Por un lado, Izq. sigue defendiendo la necesidad de abrir los Presupuestos a la participación ciudadana, dentro de nuestra opción por una democracia participativa, de forma que las asociaciones sociales y vecinales sean las que establezcan las verdaderas necesidades de sus barrios y de la ciudad en su conjunto. El PSOE también defendía esta forma de elaboración cuando estaba en la oposición, pero en sus primeros presupuestos, vemos con decepción como ha sido nulo el espacio de participación de la ciudadanía de Logroño.
Entrando en el contenido de los presupuestos, no existe ninguna partida para la creación de nuevas guarderías públicas, como prometió el PSOE en su programa, y sólo se pretende abrir la de Casa Cuna, cerrada en su día por el PP, y que, además, se quiere conceder su gestión a la empresa privada. Tampoco se afrontan nuevas iniciativas en materia de vivienda, equipamientos públicos, recuperación para la gestión pública de concesiones privadas en transporte, sanidad, cultura, etc, lo que en su conjunto nos ofrece una foto continuista y poco ambiciosa, frente a las demandas de cambio en la política municipal expresadas en las pasadas elecciones del mes de mayo.